El 23 de Abril de 1991 moría Johnny Thunders en Nueva Orleans, dejando huérfanos al rock y a cientos de camellos. Thunders, además de ser el guitarrista más importante e influyente del punk desde los primeros años 70, era un tipo difícil, introvertido, celoso y con tendencia al robo. No obstante le quedaban auténticos amigos en la música, amigos que gestaron lo que sería el primer disco tributo de los 90 en honor al desaparecido Johnny, cuyos últimos años estuvieron cargados de melancolía, adicción y anécdotas increíbles. Hoy, veinticuatro años después de su muerte, desde el blog de Locales de Ensayo Madrid – La Perrera le dedicamos este artículo a nuestro héroe. Todos sus compañeros vivos de los New York Dolls y de los Heartbreakers estuvieron en aquel disco, también dedicado a la memoria del genial batería Jerry Nolan, que falleció poco … continuar