Mötley Crüe se confiesan en «Los Trapos Sucios»

Los trapos sucios, Motley CrueOtra de las joyas literarias que ha caído en nuestras manos últimamente es nada más y nada menos que la autobiografía de Mötley Crüe, donde Nikki, Tommy, Vince y Mick recuerdan (o al menos tratan de hilvanar recuerdos entre montañas de orgías y drogas) sus peripecias personales y las de la banda más salvaje de Los Angeles. Ayudados por Neil Strauss (es difícil valorar hasta qué punto ha ejercido como negro de alguno de los Crüe) y con aportaciones imprescindibles como la de John Corabi,  nos van contando, uno por uno de manera solapada, vivencias que van desde la infancia de Nikki Sixx y su violenta adolescencia hasta los inicios de Tommy Lee en la orquesta del instituto, pasando por el alcoholismo del entrañable quasimodo Mick Mars y los permanentes picores de entrepierna de Vince Neil.

Siempre resulta interesante una biografía escrita desde los puntos de vista de varios protagonistas, y el hecho de encontrarnos las mismas historias narradas por dos o más miembros de la banda permite hacer un acercamiento completo a sus relaciones personales y sentimientos, todo ordenado con cierta cronología.

Formación de Mötley Crüe: Las correrías infantiles y juveniles de cada uno de sus miembros contadas por sí mismos. Cómo Mick pone nombre a la banda, cómo Nikki pasa de delincuente sin futuro a yonqui compositor o cómo Vince es reclutado procedente de los Rock Candy cuando ya cargaba con un hijo desde los 16 años.

Éxitos de Mötley Crüe: La composición y grabación de Shout at the Devil, el éxito masivo en L.A., convertirse en la banda oficial de los clubes de striptease gracias a Girls, girls, girls, hacerse millonarios y el éxito mundial con Dr. Feelgood.

Fracasos y tragedias de la banda: Tales como la muerte de Razzle (batería de Hanoi Rocks cuando viajaba a bordo del Panther que conducía Vince Neil), las sobredosis de Nikki Sixx, la salida de Vince de la banda, el disco electro-grunge con John Corabi, los divorcios de Tommy Lee de dos estrellas de la televisión (Heather Locklear y Pamela Anderson) y su posterior deriva musical, todo ello mezclado con constantes ingresos y salidas de centros de desintoxicación y borracheras con famosos.

Anécdotas de los Mötley Crüe: Que en realidad casi todas las conocíamos ya, pero resulta mucho más apasionante escuchar de boca de sus protagonistas cómo Ozzy esnifaba hileras de hormigas vestido de señora o cómo Vince la partía la cara a Izzy Stradlin´ y se quedaba con ganas de hacerlo con AXL Rose. Descubrir cómo era la casa que compartían Nikki, Tommy y Vince junto al Wishkey a Go-Go, siempre llena de juergas y drogas y por la que pasaban músicos como David Lee Roth a ponerse hasta el culo. Acompañar a Nikki en sus sobredosis intravenosas (una de las cuales inspiró Kickstart my heart) y en los años que pasó metido en un armario con una pistola o escuchar cómo Mick Mars habla de su terrible enfermedad degenerativa.

Motley CrueUn libro imprescindible para los fans de los Crüe, una lectura densa que atrapa y que puede generar una perniciosa influencia en el lector, y cuya consecuencia más dramática puede ser que éste acabe descubriendo que se parece en algo a cualquiera de estos cabrones. Bueno, para ser justos hay que decir que Corabi era un buen tipo. Por eso duró tan poco. Ahora sólo queda esperar que alguien edite en español el Heroin Diaries de Nikki Sixx (básicamente, los diarios que Sixx escribió en su época de adicto a la heroína a finales de los 80), ya que por increíble que parezca, «Los Trapos Sucios» deja con ganas de mucho más.

 


Comentarios

Mötley Crüe se confiesan en «Los Trapos Sucios» — 2 comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.